Roma, la necesidad de crear buen cine mexicano y sentirnos orgullosos de él. ¿O no?

Desde que vi Roma, la última joya cinematográfica de Alfonso Cuarón, caí en cuenta de varios puntos que es necesario sacar a relucir: 

Roma, la película que conmovió a México pero que también lo enojó.

Primero, digan lo que digan, Roma es una muy buena película. Tal vez no al grado de su antecesora (Gravity) pero es relativamente buena. Sin embargo, no es una película para todos. No todo el mundo la va a disfrutar e inclusive la va a tildar de aburrida, sosa y lenta. Y sí, si lo vemos así, lo es y en toda su extensión, pero para poder disfrutar de una pieza tan compleja y completa, se tiene que tomar en cuenta el todo que conforma al largometraje, es decir, el argumento no es lo único que importa, es el todo.

Segundo; la proyección casi exclusiva y monopólica de Netflix es el resultado de lo que nosotros consumimos día a día. Me refiero a que como audiencia que va a los cines a ver Mirreyes Vs Godínez o A la mala o No manches Frida, son factores que impulsan a grandes productoras y distribuidoras como Cinépolis y Cinemex a proyectar ese contenido que no aporta nada ni al mexicano, ni a la cultura general y al buen gusto. Aunque no porque a ti te hayan gustado esas películas signifique que tienes mal gusto, sólo quiere decir que fuiste a reír un rato y es algo totalmente OK. Sin embargo, son producciones mexicanas que no aportan ni un granito de arena al séptimo arte, porque sí, el cine es un arte y se le debe de tratar con el respeto que se merece así como cuando pretendes saber quien pintó Guernica o La Última Cena. 

Tercero; ¿En realidad tenemos que apoyar y sentirnos totalmente orgullosos de un proyecto completamente mexicano aunque no nos haya gustado? 

Sí.

Sí porque es necesario impulsar una nueva generación de cine mexicano que aporte verdaderamente a la conciencia colectiva, te guste o no, esto es el 2019 y las cosas así funcionan por el momento. Porque así como hay gente que idolatra el humor Derbez o que esta conforme con la idea de que el mexicano sólo sabe hacer reír con chistes de pastelazo, existe gente que odia ser encasillado en esa representación y que nuestros amigos latinoamericanos nos recuerden solamente por Chespirito.

Quieras o no, Roma esta en boca de todos, yo hablé de ella, tú lo hiciste y seguramente tu mamá también.

Como conclusión, simplemente vela, esta en Netflix y puedes ir a orinar cuantas veces quieras sin perdértela un segundo.

Sam.